Formas de ahorrar gasolina en tiempos dificiles

En tiempos tan difíciles como los que estamos atravesando desde hace unos años, con nuestra economía bastante mal parada por culpa de la crisis económica, y con los precios de los combustibles rozando constantemente el techo de los números y precios máximos, no es de extrañar que cada vez nos cueste más coger el coche y optemos por opciones más baratas como el transporte público, la bicicleta o ir caminando a lugares cercanos.

 Pero claro, ninguno de estos medios de transporte nos da tanta comodidad y tantas ventajas como utilizar nuestro propio coche. Por eso, para poder usarlo sin necesidad de gastar todos nuestros ahorros podemos seguir algunos sencillos trucos y consejos para conseguir gastar menos cantidad de gasolina durante nuestro transporte, y por lo tanto, ahorrarnos una buena cantidad de dinero.

 La clave del ahorro se encuentra en nuestro modo de conducir

 Para conseguir ahorrar combustible y dinero durante nuestros transportes en nuestro vehículo particular, es necesario que sigamos una serie de consejos y rutinas a la hora de conducir ya que precisamente eso, nuestra forma de conducir, es la clave del ahorro.

 Para empezar, no es necesario pisar el acelerador al arrancar. Es mejor que cuando arranquemos nuestro coche no pisemos ninguno de los pedales (como mucho debemos pisar el embrague en aquellos en los que sea necesario). Una vez que arranquemos, debemos utilizar la primera marcha solo en el momento en el que vayamos a arrancar, pero debemos cambiar rápidamente a la segunda marcha.

 Cambiar la marcha y conducir a bajas revoluciones también nos ayudará a ahorrar combustible. Así, debemos cambiar de marcha cuando nuestro coche se encuentre entre las 2.000 y las 2.500 revoluciones en los coches con motor de gasolina, bajando hasta las 1.500 y 2.00 revoluciones en motores diesel. En cuanto a las bajadas, debemos utilizar siempre la marcha más larga, utilizando el propio rodaje del coche.

 Debemos evitar en la medida de lo posible conducir por encima de estas revoluciones, así como también debemos evitar siempre que podamos los acelerones y los frenazos bruscos, manteniendo una velocidad más o menos constante

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