Muchos conductores experimentados nunca han tenido que rellenar un parte amistoso con alguien y la tarea solamente de pensarlo les pone nerviosos. Rellenar un parte es sencillo, pero rellenarlo bien tiene un poco más de complicación, aunque no mucha.
Lo más importante a la hora de ponernos con el papeleo es tranquilizarnos. No pasa nada si hemos tenido la culpa ya que todos cometemos errores y podemos equivocarnos, pero como ya hemos dicho lo importante es no estar neriovos. En ningún momento debemos faltar al respeto al otro conductor por habernos dado o no, ni permitir que él nos los falte a nosotros aunque no estemos de acuerdo con quién es el culpable.
Una vez nos hemos relajado es importante inspeccionar los daños causados a ambos vehículos para tener ambos claro qué ha ocurrido exactamente y poder redactarlo lo mejor posible. SI no nos ponemos de acuerdo con quién tiene la culpa lo mejor es exponer los hechos fielmente y que los seguros se pongan de acuerdo.
Sé lo más fiel posible a lo ocurrido
En algunas ocasiones nos obcecamos con rellenar todos los datos de ambos conductores y no hacemos caso a las casillas centrales, que al fin y al cabo son los más importante del parte. Una vez hemos rellenado los datos personales de los conductores teniendo especial cuidado con los números de poliza y las aseguradoras es momento de ir a los daños.
En la parte central encontramos el apatado llamado «circunstancias«. En él solamente hay que poner una X a la situación en la que nosotros nos encontrábamos y a la situación del otro vehículo. Muchas veces es necesario marcar varias, así que uno no debe preocuparse por eso; pero eso sí nunca deben ser contradictorias. Es imposible encontrarse en movimiento y a la vez estacionado.
El número de casillas marcadas no es importante, pero es necesario recordar apuntar abajo el total de las que se han marcado para que luego nadie marque más de mala fe o por error. Hay que estar de acuerdo en todo lo marcado ya que afecta a los dos conductores.
La casilla observaciones sirve para detallar más concretamente dónde nos han golpeado para que no queden dudas. En descripción del accidente se termina de dibujar un croquis y además se escribe lo acontecido. Por último no firmes si no estás conforme con lo escrito porque te puede traer problemas más adelante.
