El juez Joaquín José Ortiz Blasco fue imputado en el escándalo de la ITV de Cataluña porque presuntamente había asesorado a varios de los empresarios implicados sobre recursos presentados en la sala que el presidía. Es decir, nunca mejor dicho pretendió ser juez y parte, o ayuda de la parte, en el proceso. Tras eso pidió un traslado a Madrid que le fue concedido pero no se le permite ejercer como medida cautelar, hasta que se celebre el juicio.
El juez Ortiz puso un recurso contra estas medidas que le impedían ejercer su cargo, pero el mismo fue desestimado por el Tribunal Supremo que lleva el caso, que confirmó las diligencias que habían sido practicadas, lo que obliga al juez apartado a continuar en esa condición hasta que se celebre el juicio y se emita la sentencia.
Otro juez podría estar implicado
Parece ser que la lista de implicados en este caso no deja de crecer, ya que se ha denunciado que otro juez del Tribunal Superior de Justicia de Cataluña podría estar implicado en tareas de asesoramiento a alguno de los implicados, en un presunto delito similar al del juez Ortiz Blasco. Por ahora no ha trascendido el nombre del nuevo magistrado que podría entrar a formar parte del proceso.
En otro orden de cosas, pero siguiendo con la trama de las ITVs en Cataluña, la Audiencia de Barcelona ha desestimado el recurso presentado por tres de los empresarios imputados en el proceso que pretendían la nulidad de las escuchas efectuadas a varios de los implicados en el procedimiento judicial.
La Audiencia ha mantenido que tanto las escuchas telefónicas, como los mails y mensajes interceptados tienen validez y que la jueza que en su momento las ordenó actuó movida por datos objetivos y no por «meras sospechas, ni valoraciones anímicas»
Las escuchas son válidas según la Audiencia de Barcelona
En la respuesta al recurso la Audiencia afirma que las escuchas son una «medida proporcional al delito o delitos que se pueden cometer por concretas personas, para lo que están realizando actos físicos, teniendo contactos telefónicos, celebrando reuniones y pergeñando la famosa sociedad que les permitirá canalizar su actividad ilícita, actividad de especial interés pues afecta a dinero público».
Recordemos que las escuchas son la principal prueba de cargo contra todos los acusados y de haberse anulado la acusación habría quedado vacía de contenido, por lo que es muy importante que por ahora se mantengan las pruebas.